domingo, 30 de enero de 2011

PERSONAJES

Como un caballero en una cruzada.
Como un flautista entonando una melodía.
Como un escudero preparando las armas de su caballero.
Como un gato calzándose los pies.
Somos como los protagonistas de un cuento, de una historia, de una novela a la que no tenemos que buscarle el final sólo el “continuará”.

2 comentarios:

  1. El problema viene cuando nos tomamos demasiado en serio a nuestros personajes... Me ha gustado la entrada y no sabía que pusiste los pingüinos graciosos. Besitos.

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  2. Claro que hay que tomarse en serio los personajes, para interpretarlos bien. ;)

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